Habla Luzbel

Habla Luzbel y dice:
“Escuchadme los cielos…!”
Soy arcángel caído por mis locos anhelos,
soy rebelde sublime y mi estirpe es divina
y mis labios modulan formidable doctrina,
mis palabras son fuego, mis pupilas enhiestas
tienen brillo salvaje.
Mis terribles protestas
son cantos que interpretan mis líricos enconos.
Mis gestas formidables hacen temblar los tronos.

Soy águila gigante. La mística paloma
huye de mi granmdeza.
Las parras de Sodoma
fueron el rojo cáliz donde aplaqué mis iras.
Yo soy un gran rebelde.
El choque de las liras
de hierro anunciarán las grandes rebeliones;
seré entonces caudillo, con todas mis legiones
levantaré los pueblos.

AI cielo irán mis manos.
El arcángel Ariel derrocará tiranos.
El fuego de mi fragua encenderá furores
y Ariel que es un rebelde derrocará señores.
Yo beberé en el cáliz de las ponzoñas, pleno
con sangre de dragón y con mortal veneno.
¡Es mía la venganza!

Por amor a los siervos
arrollaré iracundo la parvada de cuervos.
Cuando vibre mi fuerza hare temblar el músculo
y Dios, el Dios potente, columbrará el crepúsculo
de su reinado injusto.
Los rebeldes poetas
serán mis compañeros.
Mis candentes saetas
embriagaré de sangre.
Mi espada ignipotente
devorará la carne.
El ceño de mi frente
fulminará los réprobos de la Luz y la Vida.
Yo soy el rey del fuego.

De mi fragua encendida
brotaran los radiantes y fúlgeos rayos helios.
Yo soy un nuevo Cristo; mis nuevos evangelios
estan llenos de Luz.
Soy revolucionario.
Yo he sufrido mucho; mi sangriento calvario,
ha sido doloroso.
Yo soy divino Harmodio,
por eso, hermanos, quiero impregnaros mi odio,
mi odio al Gran Tirano.
Atrevido es mi anhelo,
si me seguís, hermanos, vuestras plantas el cielo
hollarán. Elegidme por caudillo, ya es hora
de rebelión. Marchemos! El plaustro de la Aurora
aparece en Oriente”…
El ceño de la frente
de Luzbel ostentó el purpurino encono
y Dios tembló de miedo desde su Augusto trono…

13-II-1913